El colesterol alto es un factor de riesgo importante para la salud cardiovascular, especialmente en personas mayores. Como cuidador no profesional...
Cómo controlar el colesterol de nuestros mayores: guía para cuidadores responsables
A medida que envejecemos, controlar los niveles de colesterol se convierte en una prioridad para preservar la salud cardiovascular. En el caso de las personas mayores dependientes, este control es especialmente importante, ya que el colesterol elevado es un factor de riesgo asociado a enfermedades graves como el infarto de miocardio o el ictus. Si eres cuidador no profesional de un familiar mayor, entender los niveles normales de colesterol y saber cómo gestionarlos podrá marcar una gran diferencia en su calidad de vida.
En este artículo te explicamos cómo controlar el colesterol de nuestros mayores de forma natural, segura y con un enfoque centrado en el cuidado personalizado. Abordaremos desde los valores normales por edad hasta las estrategias más efectivas para reducir el colesterol malo (LDL) y aumentar el colesterol bueno (HDL). Si quieres consulta nuestro artículo para saber los valores normales de colesterol.
¿Qué es el colesterol y por qué es importante en la tercera edad?
El colesterol es una sustancia grasa esencial para el organismo, pero su exceso en sangre puede obstruir las arterias. Hay dos tipos principales:
- Colesterol LDL (colesterol malo): se acumula en las paredes arteriales y favorece la aparición de placas.
- Colesterol HDL (colesterol bueno): ayuda a eliminar el colesterol malo del torrente sanguíneo.
En personas mayores, el metabolismo se vuelve más lento, y la actividad física suele disminuir. Esto, unido a posibles efectos secundarios de medicamentos o una alimentación inadecuada, puede provocar un aumento de los niveles de colesterol, especialmente del LDL.
Valores normales de colesterol en adultos mayores
Los valores considerados normales pueden variar según edad, sexo y condición de salud. Como referencia general:
- Colesterol total: menos de 200 mg/dL
- LDL (malo): menos de 100 mg/dL (ideal), hasta 130 mg/dL (aceptable en mayores sin patologías cardiovasculares)
- HDL (bueno): más de 50 mg/dL en mujeres y más de 40 mg/dL en hombres
- Triglicéridos: menos de 150 mg/dL
Por ejemplo, el colesterol normal en una mujer de 60 años debe mantenerse dentro de estos valores, aunque si tiene antecedentes de cardiopatías, los objetivos pueden ser aún más exigentes.
¿Cómo bajar el colesterol de nuestros mayores sin medicamentos?
Aunque en algunos casos el uso de estatinas es necesario, muchos mayores pueden controlar el colesterol de forma natural con cambios en el estilo de vida. Estas medidas son especialmente recomendables si se aplican de forma temprana y continuada:
Alimentación saludable y adaptada
Una dieta equilibrada es clave para bajar el colesterol malo (LDL) y aumentar el bueno (HDL):
- Elige grasas saludables: como las del aceite de oliva virgen extra, el aguacate y los frutos secos naturales.
- Reduce grasas saturadas y trans: presentes en embutidos, bollería, precocinados y fritos.
- Aumenta la fibra soluble: contenida en avena, legumbres, manzana, pera y cebada, ayuda a eliminar el colesterol.
- Introduce pescado azul: como sardina, caballa o salmón, ricos en ácidos grasos omega-3.
- Evita azúcares refinados y exceso de sal: ambos afectan indirectamente los niveles de colesterol y la salud general.
Actividad física adaptada
El ejercicio regular es fundamental para mejorar el perfil lipídico. En personas mayores, la actividad debe adaptarse a su capacidad física:
- Caminar 30 minutos diarios a paso suave o moderado.
- Realizar ejercicios de movilidad y equilibrio.
- Participar en talleres de gimnasia suave, yoga o baile para mayores.
El ejercicio no solo mejora el colesterol, sino que también ayuda a controlar el peso, la presión arterial y el estado de ánimo.
Control del peso y del perímetro abdominal
El exceso de grasa abdominal está relacionado con niveles altos de colesterol LDL y triglicéridos. Es importante mantener un peso estable y saludable. Para personas mayores, más que centrarse en la pérdida de peso drástica, se recomienda evitar el aumento progresivo y fomentar una composición corporal adecuada.
Abandono del tabaco y moderación del alcohol
El tabaco reduce los niveles de HDL y daña las arterias. En el caso del alcohol, puede estar permitido con moderación, especialmente el vino tinto por sus antioxidantes, pero siempre bajo control médico.
¿Cuándo se necesitan medicamentos para controlar el colesterol?
Si a pesar de los cambios en el estilo de vida los niveles de colesterol se mantienen altos, el médico puede indicar tratamiento farmacológico. Las estatinas son los fármacos más comunes, aunque en personas mayores pueden tener efectos secundarios como debilidad muscular o interacciones con otros medicamentos.
El uso de medicamentos debe ser valorado individualmente por el especialista, teniendo en cuenta la historia clínica, la presencia de enfermedades cardiovasculares previas y la fragilidad del paciente.
El papel del cuidador en el control del colesterol
Como cuidador no profesional, tienes un papel clave en la prevención y el seguimiento del colesterol:
- Prepara comidas saludables adaptadas a las necesidades de la persona mayor.
- Motiva la actividad física y organiza rutinas.
- Controla el cumplimiento de la medicación si la hubiera.
- Acompaña a las visitas médicas y comparte observaciones con los profesionales.
Además, puedes fomentar la autonomía en las decisiones relacionadas con la salud, siempre adaptándote al nivel de comprensión y participación de la persona mayor.
Cuidar con responsabilidad y prevención
Controlar el colesterol en la tercera edad no solo implica cifras en una analítica, sino comprender el contexto y las necesidades particulares de cada persona mayor. Con pequeños cambios sostenidos en el tiempo, es posible prevenir complicaciones graves y mejorar la calidad de vida.
Cuidar con responsabilidad es también acompañar en la educación para la salud, fomentar hábitos saludables y dar el paso hacia una vida más activa y equilibrada. Recuerda: cuidar el corazón también es una forma de cuidar con el corazón.
TÚ ERES #IMPRESCINDIBLE