Cómo conseguir movilizaciones menos dolorosas en personas con artrosis y artritis

A las diferentes patologías que pueden causar pérdida de movilidad y parálisis, a menudo se suma en las personas ancianas la artrosis o la artritis. Además de empeorar su autonomía en el movimiento, estas enfermedades de las articulaciones resultan muy dolorosas en las actividades cotidianas, incluyendo las movilizaciones necesarias para su cuidado, aseo y cambios de postura.

Si este es el caso de tu ser querido dependiente, te ofrecemos algunos consejos para conseguir movilizaciones menos dolorosas y aliviar su malestar en el día a día.

Recomendaciones para movilizar a un paciente con artrosis o artritis

Las movilizaciones pueden ser muy dolorosas en los pacientes con artrosis o artritis avanzados, especialmente por la mañana. Te proponemos algunas acciones que puedes llevar a cabo para reducir el dolor de las movilizaciones:

  • Por las mañanas se tiene mayor rigidez y dolor. Por eso, antes de levantar al paciente de la cama, es aconsejable poner calor en las articulaciones más lesionadas durante unos minutos. Por ejemplo, se puede utilizar una esterilla térmica, paños calientes o gel efecto calor. Un masaje en la zona también ayudará a mejorar los síntomas.
  • Déjate aconsejar sobre grúas y ayudas para levantar y movilizar a la persona dependiente a tu cargo. A veces, aunque lo hagamos con la mejor de las intenciones, las movilizaciones a mano desnuda son más incómodas, dolorosas y con mayor riesgo de lesiones para el cuidador también.
  • Al lado de cada asiento, coloca una agarradera o un mueble donde se pueda apoyar el peso para volver a levantarse. De esta forma, se repartirá la presión sobre varias articulaciones y se evitará el dolor extremo.
  • Aunque las movilizaciones sean dolorosas, no se debe mantener durante mucho tiempo la misma postura, ya que después el dolor será aún más intenso. Es conveniente ir movilizando las articulaciones afectadas cada poco tiempo.
  • Es aconsejable utilizar un colchón duro para dormir y sillas de respaldo recto para sentarse.
  • La altura de los asientos también deberá ser adecuada: las rodillas nunca deben permanecer dobladas en un ángulo inferior a los 90º (deben mantener un ángulo recto). De esta forma, evitamos forzar en exceso la articulación al levantarnos del asiento.
  • Durante el día se pueden utilizar aplicaciones de calor o frío (según lo que más alivie) con mantas eléctricas, geles, paños, etc. Pero nunca durante más de 20 o 30 minutosPuede ser una buena idea utilizarlos antes de cada cambio de postura.

Otros consejos para aliviar la artrosis y artritis

Además de las acciones puntuales, las personas con artrosis o artritis pueden poner en práctica estos otros consejos para mejorar su calidad de vida en general:

  • Evitar la obesidad, ya que, a mayor peso corporal, mayor presión y dolor sobre las articulaciones.
  • Realizar actividades físicas moderadas, acordes a la edad y estado de salud de la persona, ya que está demostrado que reducen la sensación general de dolor. Los ejercicios que produzcan dolor no se deben realizar y, en caso de aumento repentino del dolor, es conveniente guardar reposo durante 2 o 3 días.
  • Realizar ejercicios específicos para fortalecer los músculos que rodean a las articulaciones afectadas, como ejercicios de dedos en caso de que la artritis afecte a las manos, o actividades que refuercen los cuádriceps en caso de daño en las rodillas.
  • Llevar una dieta mediterránea y evitar los productos ultraprocesados, los excesos de azúcares y los aceites refinados. Una mala alimentación puede contribuir a empeorar la inflamación.
  • Si la persona dependiente todavía mantiene cierta autonomía, puede ser buena idea iniciar el día con una ducha de agua caliente. Así calmaremos de forma generalizada el dolor para que pueda llevar a cabo sus actividades diarias sin impedimentos.
  • Las personas que conservan la capacidad de caminar, deben llevar un calzado cómodo y adecuado para evitar las malas posturas. Aunque sientan dolor, es conveniente que mantengan la costumbre de caminar algo cada día, o de lo contrario es posible que acaben perdiendo esta capacidad a la vez que aumenta el dolor en sus articulaciones.

¿Te han parecido interesantes estos consejos? ¿Qué medidas tomas tú para evitar el dolor en las movilizaciones? ¡Escríbenos un comentario y comparte tu experiencia!

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