Síntomas y causas de la cistitis sangrienta

La cistitis hemorrágica es una inflamación de la vejiga que puede tener varias causas. Cuáles son los síntomas y qué hacer.

La cistitis hemorrágica o cistitis hemorrágica es una inflamación aguda de la vejiga que se manifiesta con la expulsión de coágulos de sangre a través de la orina.

Si padeces este trastorno, debes saber que las causas pueden ser muchas y variadas, pero pueden dividirse en dos categorías principales: infecciosas, y no infecciosas.

Las causas de la cistitis de naturaleza infecciosa incluyen bacterias y virus, que se desplazan por la uretra, reproduciéndose e infectando la mucosa de la vejiga.

La bacteria más común es Escherichia coli, que es la responsable del 85% de las cistitis infecciosas. Esta bacteria se encuentra generalmente en la flora intestinal, donde es bien tolerada, pero provoca infecciones si coloniza el tracto urinario.

La cistitis no infecciosa también se denomina estéril, y puede ser la consecuencia de la radioterapia o la quimioterapia.

¿Qué es la cistitis?

La cistitis es una infección de las vías urinarias que afecta predominantemente a las mujeres.

Provoca ardor y dolor al orinar, y una necesidad constante de orinar.

Síntomas de la cistitis:

• Dolor por encima del pubis.
• Frecuente sensación peneana.
• Incontinencia de urgencia.
• Ardor o dolor al orinar.
• Sensación de vaciado incompleto de la vejiga.
• Pequeños coágulos de sangre en la orina (hematuria)

¿Qué debo hacer si tengo cistitis con sangre?

La cistitis con sangrado es un trastorno muy molesto y especialmente doloroso.

Es importante que no subestimes el alcance del problema y que consultes con un especialista para prevenir la aparición de infecciones, sobre todo cuando la cistitis se repite en el tiempo.

La cistitis con sangrado es un trastorno muy molesto y especialmente doloroso.

La prueba recomendada en este caso escultivo de orina, que te dirá quién es el responsable de la infección y qué antibióticos tomar.

Los fármacos más utilizados para el tratamiento de la cistitis hemorrágica son los analgésicos y los antibióticos.

Además, para favorecer el proceso de curación se recomienda:

• Beber mucha agua: beber mucho líquido ayuda a expulsar las bacterias a través de la orina.
• Evitar los irritantes de las vías urinarias como el alcohol, el café, el chocolate y las guindillas.
• Mantener una higiene íntima exhaustiva, especialmente después de mantener relaciones sexuales.

Una cistitis tratada inadecuadamente puede provocar complicaciones renales.

Cistitis con sangre en el embarazo

Si estás embarazada y sientes ardor al orinar, es posible que hayas contraído esta infección.

La cistitis en el embarazo se ve favorecida por los cambios hormonales, de hecho, el aumento de progesterona hace que los músculos lisos del uréter se relajen.

La compresión uterina también desempeña un papel importante, sobre todo en los últimos meses de gestación.

Hay un obstáculo mecánico para el vaciado completo de la vejiga, y la orina estancada se enriquece en glucosa, un nutriente para los gérmenes.

En el 90% de los casos, el culpable de la infección es la Escherichia coli, que coloniza la vejiga durante las relaciones sexuales o debido a una higiene íntima deficiente.

Si estás esperando un bebé es importante que no subestimes este trastorno, la cistitis siempre debe ser tratada.

Las infecciones de vejiga y riñón pueden provocar un parto prematuro y reducir el peso del feto.

Recuerda: nunca inicies de forma espontánea ninguna terapia para la cistitis.

Consulte a su médico que le aconsejará sobre la terapia y pruebas más adecuadas a realizar.