El perfil del cuidador en España

¿Cómo son los cuidadores y las cuidadoras de personas dependientes y mayores en nuestro país? ¿A qué perfil demográfico responden? ¿Cómo afecta su rol de cuidadores sobre su vida cotidiana? Con el objetivo de responder…

¿Cómo son los cuidadores y las cuidadoras de personas dependientes y mayores en nuestro país? ¿A qué perfil demográfico responden? ¿Cómo afecta su rol de cuidadores sobre su vida cotidiana? Con el objetivo de responder a estas preguntas el Instituto Nacional de Estadística realiza una encuesta de hogares, dando a conocer mejor las características personales del principal perfil cuidador en España.

El principal perfil de cuidador en España, más bien cuidadora, es de una mujer que se encuentra entre los 45 y 64 años de edad y que habita en la misma vivienda que la persona cuidada. De hecho, el 78.9% de cuidadores viven con la persona a la que prestan cuidados, lo cual suele implicar un parentesco familiar directo. En cuanto a la nacionalidad, solamente el 6.9% de cuidadores principales son extranjeros.

“El principal perfil de cuidador es una mujer de entre 45 y 64 años de edad que habita en el mismo hogar que la persona cuidada”

Tal y cómo podemos comprobar en el siguiente gráfico sobre el perfil de los lectores de este blog, es decir, vuestro perfil, estos datos se corresponden con los del INE:

perfil_lectores

Fuente: Google Analytics. Perfil de los lectores de este blog

Mujeres cuidadoras

La familia, y en especial las mujeres, siguen siendo el pilar principal del cuidado de personas dependientes. Lo mismo sucede en Grecia, Italia y demás países con el modelo de bienestar mediterráneo donde la familia ocupa un lugar muy importante en la protección y cuidado de sus miembros.

De este modo, en el 85% de los casos los cuidados vienen de parte de una mujer, con una media de edad alrededor de los 52 años, con estudios primarios y sin una ocupación remunerada normalmente. Estas cuidadoras responden a la última generación de mujeres no activas en el mercado laboral. No obstante, con la entrada masiva de la mujer en el mercado laboral esta tendencia está cambiando, dándose cada vez más casos de cuidadores masculinos.

En lo que se refiere al parentesco entre cuidadora y cuidado, en el 43% de los casos suele tratarse de hijas, en un 22% de esposas y en un 7.5% de nueras.

Como vemos en el estado español el papel de las familias es crucial en el cuidado de nuestras personas mayores y dependientes. Gracias al sacrificio de los más cercanos, y especialmente el de las mujeres, se vela por el bienestar y dignidad de estas personas en situación de dependencia.

Dedicación del cuidador

Ocuparse de una persona dependiente supone jornadas largas, en las que se trabaja tanto mañana, tarde como noche. De hecho, prácticamente la mitad de personas dependientes y ancianas son atendidas durante ocho horas diarias o más. Esta dedicación plena puede ser causa de un alto nivel de estrés, por lo que los cuidados al cuidador son de vital importancia para que éste pueda continuar desempeñando sus labores correctamente.

En un 77.2% de los casos se trata de cuidadores permanentes, principalmente familiares. El 17% de los casos, sin embargo, se trata de cuidadores que tienen a más de una persona dependiente bajo su cargo, este tipo de multicuidadores suelen responder a un perfil más profesional.

Para todos aquellos cuidadores no profesionales, o que viven en el mismo hogar que la persona a la que prestan cuidados sin estar empleados en él, asumir el rol de cuidadores supone un cambio drástico en sus vidas. De hecho, el 63.7% asegura haber reducido considerablemente su tiempo de ocio para poder cumplir con sus tareas. Además, para el 54.4% adoptar el rol de cuidador ha supuesto consecuencias tanto en su vida laboral como en su situación económica.

¿Y tú te sientes identificado con este perfil de cuidador?

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